El destino es una palabra que, según la RAE, designa las circunstancias de ser favorable o adversa esa supuesta manera de ocurrir los sucesos a algo a alguien; según las personas, es aquello que nos guía en nuestra vida, aquello que ya está decidido, la meta a algo, el punto de llagada. Seguramente es una de las palabras con una carga de fe mas importante, pero muy a mi pesar señores y señoras, siento comunicarles que no existe: es una mera palabra para hacernos creer que algo es así porque el destino, o lo que sea (llámale X) lo marca, un escudo para justificar nuestras acciones, algo que nos ayuda a soñar, pero por bien o por mal, el destino lo elegimos nosotros, lo hacemos con nuestras acciones, con nuestras decisiones e incluso con nuestros pensamientos. Por ello, he de decirle a esa idea equivocada del destino una cosa:
¡vete a la mierda!
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